Los derechos culturales

✍ Observatorio de Derechos Culturales

Fomentar el conocimiento y la defensa de los derechos humanos es una parte esencial de cualquier proyecto que, como el nuestro, aspire a la formación y el cultivo de una conciencia cívica nacional. Estos derechos son, en principio, universales, interdependientes e indivisibles, sin embargo, es necesario parcelarlos para que su protección sea más efectiva y su comprensión más profunda.

En Cuba existe desde hace décadas un sistema político diseñado para impedir o dificultar el ejercicio de la mayor parte de los derechos humanos, no importa que un texto constitucional vigente los consigne como derechos fundamentales. Es natural, por consiguiente, que existan personas, organizaciones y proyectos dentro de lo que se suele llamar sociedad civil, o su potencial precedente, cuya actividad esté encaminada a promover el cultivo y la protección de estos derechos.

Memoria Cívica aspira a dar visibilidad y cooperar en estos esfuerzos. Por este motivo iniciamos una colaboración con el Observatorio de Derechos Culturales (ODC). En el panorama cubano la situación de los derechos humanos es tan lamentable que muchas veces algunas de sus parcelas reciben una atención insuficiente. El ODC es uno de los proyectos que contribuyen a llenar este vacío en el ámbito de los derechos culturales.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos expresa en su artículo 27 que:

1. Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten.

Se trata de unos derechos de los que se disfruta tanto individual como colectivamente, pero que atañen a todos los individuos de la sociedad sin distinción. El ODC en su labor cotidiana documenta y denuncia las violaciones de estos y otros derechos, especialmente las que sufren artistas, intelectuales y creadores en general. Al mismo tiempo promueve a los creadores y espacios independientes que intentan crear una cultura libre y fuera de la servidumbre que impone la burocracia oficialista en los ámbitos que están bajo su control.

Ahora bien, el mismo artículo 27, en su apartado segundo afirma que:

• Toda persona tiene derecho a la protección de los intereses morales y materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas, literarias o artísticas de que sea autora. 

Y este será, precisamente, el punto donde iniciará nuestra colaboración con el ODC: el Derecho de Autor. Se trata de una rama del derecho cuyo aprendizaje, aunque sea general y básico, beneficiaría tanto a creadores como al público en general. No importa que sea también muy recomendable buscar asesoría especializada para defender con efectividad sus intereses en este sentido si fuera necesario.

En el caso cubano, marcado por la vocación totalitaria del estado y la abusiva omnipresencia de las instituciones oficiales en el panorama cultural, el artista, escritor, intelectual, etc., necesita tener clara noción de cuáles son sus derechos en tanto creador. Esta necesidad se hace imperiosa si el creador pretende desarrollar su obra completa o parcialmente al margen de las instituciones oficiales, esas que siempre aspiran a controlar y apropiarse los espacios culturales dentro del país e incluso, en ocasiones, fuera de él.

Sobre este tema, el ODC inició en julio de 2023 una serie informativa que ha publicado sin interrupción con frecuencia semanal. En ella se han descrito y analizado fundamentos teóricos y doctrinales de la materia y de paso los convenios internacionales y la ley nacional que la regula. Entre sus propósitos se encuentra el de ayudar al creador independiente, y a todo el que se encuentre en una situación similar, a afrontar la posible hostilidad o escasa colaboración por parte de los organismos e instancias nacionales que tienen la función de proteger sus derechos con la mejor comprensión sobre los mismos. Esta serie de publicaciones pretende facilitar un mejor conocimiento del alcance, la estructura y los límites de los derechos de los creadores sobre sus obras, así como de las herramientas que existen para su defensa tanto en el plano nacional como en el internacional.

Los autores y sus beneficiarios ejercen sobre las obras derechos que pueden tener una significación económica relevante para ellos. Queremos insistir, sin embargo, en que el derecho de los autores sobre sus obras va más allá de la dimensión económica que pueda tener y que en tal sentido se encuentra protegido y enunciado en diferentes instrumentos internacionales de defensa de los derechos humanos.

Dicho lo anterior, Memoria Cívica se complace en anunciar que emprenderá, en colaboración estrecha con el ODC, la publicación de una versión ampliada y revisada de cada una de las entregas de esta serie que podrá ser consultada en nuestra página web y a través de nuestras redes sociales.

El ODC continúa publicando una nueva entrega de esta serie cada semana que recomendamos encarecidamente y que puede ser consultada en sus redes sociales. A partir de ahora nuestros lectores podrán acceder también a este contenido íntegramente desde el inicio.